En un movimiento que ha generado gran controversia, la Sección Instructora de la Cámara de Diputados decidió no admitir la solicitud de desafuero contra Cuauhtémoc Blanco, exgobernador de Morelos. La decisión fue respaldada por la mayoría de legisladores de Morena, quienes argumentaron que no existían elementos suficientes para proceder con la solicitud.
La solicitud de desafuero fue presentada por la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción de Morelos, que acusa a Blanco de presuntos actos de corrupción y enriquecimiento ilícito. Sin embargo, legisladores de Morena, PT y PVEM votaron en contra de iniciar el proceso, argumentando que la petición tenía tintes políticos.

Por su parte, diputados de oposición, principalmente del PAN, PRI y PRD, criticaron la decisión y acusaron a los legisladores oficialistas de proteger al ahora legislador. «Están promoviendo la impunidad en contra de una mujer que se dice agredida y yo le creo», puntualizó el diputado del PAN, Germán Martínez.
Además, la Sección Instructora decidió posponer la sesión en la que se discutiría la solicitud de desafuero, lo que generó críticas por parte de la oposición. Legisladores del PRI y PAN señalaron que esta medida es una estrategia para proteger a Blanco.
El exfutbolista Cuauhtémoc Blanco no se ha pronunciado sobre la resolución de los diputados, aunque en ocasiones anteriores ha negado cualquier responsabilidad en los señalamientos en su contra. La decisión de la Sección Instructora ha generado un gran debate en la opinión pública y ha puesto en duda la capacidad del sistema político para abordar casos de corrupción y justicia.