Un becerro con dos cabezas fue encontrado en el vientre de una vaca sacrificada, en el rastro de Tampico Alto, Veracruz.
Fue el 7 de febrero pasado cuando después de sacrificar al animal, se percataron que estaba cargada.
El vacuno procedía del municipio de Aldama, Tamaulipas.
Por lo general, se desconoce si una vaca está embarazada cuando llega al rastro, además de que al presentar tal anormalidad genética al ser extraídos ya no tienen vida.